La
información y el conocimiento se obtienen de la experiencia, y
para que queda constancia de la misma, se recogen en un soporte,
con lo que pasan a ser documentos. Los documentos pueden tener
diferentes soportes, desde la piedra a los digitales. La información
digitales no es una excepción a este esquema, simplificado a efectos
de explicación. Los documentos en soporte o formato digital (quizá
mejor decir en formato) son informativos, y sus objetivos, estructuras
y contenidos pueden ser tan variados como variado es el mundo
real.
El
producto de información que nos interesa es un documento digital.
La palabra documento es lo suficientemente rica y polisémica para
servir perfectamente como término de referencia. El documento
digital es un producto de información y de comunicación,
se crea, se utiliza y tiene su ciclo de vida en un entorno digital.
Se trata de un documento dinámico, en cuanto puede variar
espacial, temporal e informativamente, e interactivo, en
cuanto el usuario/lector posee capacidad de decisión en su lectura/exploración/navegación.
En breve tiempo será adaptativo, siendo capaz de variar
en consonancia con las necesidades de los usuarios individuales.
Las
características del documento digital hacen que éste sea una unidad
informativo-documental de significado completo, compuesta
de uno o de varios componentes informativos enlazados entre sí,
y que a su vez puede enlazarse con otros documentos o con otros
elementos, con los cuales pueda establecerse una relación lógica.
Frente
al documento "tradicional", el documento digital puede ofrecer
al usuario/lector herramientas para desarrollar su propio proceso
cognitivo de lectura, comprensión y selección, así como de localización
y recuperación de nuevos documentos asociados temáticamente. Mediante
estos recursos se integra la interactividad comunicativa como
uno de los componentes fundamentales del documento digital. El
ejemplo más evidente de documentos digitales lo tenemos en el
las páginas del World Wide Web, aunque no ha sido ni el primero,
ni es el único, sistema de documentos digitales. Las aplicaciones
hipertextuales son ejemplos de ello. HTML, XML, PHP... son técnicas
de producción de componentes de documentos digitales: por encima
de ellas están el diseño y la arquitectura
de información.